La defensa del arquitecto técnico imputado por el derrumbre del túnel de bateo en enero de 2009, ha pedido al juez que archive el caso. Esta peticiónse fundamenta en que la supuesta causa de la caída del edificio fueron las malas condiciones meteorológicas: los peritos ratificaron que el día de la tragedia se produjo una ciclogéenesis explosiva -borrasca que se genera de forma muy rápida y muy intensa- en toda Cataluña, fenómeno poco habitual en nuestro territorio.
Según la defensa, la afectación de las condiciones del temporal están por encima de cualquier defecto ene l diseño de la edificación.
Si bien es cierto que la situación del campo de béisbol no es la más propicia en cuanto a padecer los efectos del viento por su particularidad orografía y que se llegó a apreciar vientos de una intensidad de 160 km/h, también hay que recordar las fallas que se hallaron en la construcción de esta instalación y que no deberían tampoco pasarse por alto. Sin embargo, en los 15 años que llevaba en pie la construcción, se habían registrado vientos superiores a los que la normativa de la época de su creación determinaba por lo que los abogados se han escudado en argumentar que si existía algún defecto no era de gran envergadura.
La defensa aceptaría como mucho que fue una imprudencia leve y, por tanto, debería sobreseguirse el caso y abrir un juicio de faltas. El abogado defensor arguye que si no se aceptan ninguna de las anteriores peticiones demandadas, solicita que se archive la causa puesto que probarían que no fue éste quien dirigió la ejecución del túnel sino que, simplemente, firmó el proyecto porque se requería la firma de otro arquitecto.Sea como fuere, por falta de un seguimiento en la revisión del edificio, por el tiempo u otros motivos, Sant Boi vivió ese día una de sus jornadas más trágicas y en la memoria siempre permanecerán cuatro pequeños que disfrutaban del deporte hiciera buen tiempo o mal tiempo.
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