La plaza Cataluña empieza a resonar a golpe de tambores. Un pasacalles protagonizado por "Percussió" y "Diables Sant Boi" nos hace movernos a un ritmo alternante entre un grupo y el otro. Tras el calentamiento inicial, emprendemos la marcha hacia la Muntanyeta por las calles Mallorca y la calle Pau Claris siempre a golpe de timbal.
Sobrepasando las nueve de la noche, comenzaba la representación de la leyenda de Sant Jordi llevada a cabo por los niños y niñas del CEIP Montbaig. Fue una puesta en escena con mucha entrega y viveza, donde las sorpresas en la historia no faltaron. Como ayudantes, los pequeños actores contaban con la colaboración del Drac Pepito y el Drac Rufino que lucharon con el joven que tuvo el valor de enfrentarse con la bestia que atemorizaba al pueblo. En esta versión, nuestros dragones no pierden la vida sino que acaban sirviendo a la princesa que querían llevar en su interior de muy diversa manera como habían hecho con tantas otras doncellas.
Así, nuestros dragones seguirán tan llenos de energía como siempre, deleitándonos con su presencia y sus bailes, con sus historia que es también nuestra historia.
TAMARA GONZÁLEZ CUEVAS
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